¡ CUCUTILLA! ... ¿DÓNDE ES ESO?, ...¿ES UNA CÚCUTA
PEQUEÑA?. Son preguntas
inevitables de las personas que no conocen el municipio, ó incluso de aquellas
que conociéndola en ocasiones indagan de manera despectiva y supina como
pretendiendo asimismo sorprenderse al oír hablar de esta población con nombre
de aparente “diminutivo”, desconociendo que él encarna toda la historia y
linaje de un legendario y hermoso pueblo.
Infortunadamente
estas preguntas por momentos nos sorprenden y hacen vacilar sobre qué decir del
municipio y su historia, y el porqué de nuestra conducta y obrar frente algunos
hechos.
Para iniciar, con relación a su nombre diversas son las
teorías que han tratado establecer su origen y que la tradición ha trasmitido a
través de los años sin que en verdad se haya despejado con satisfacción este
interrogante.
Cierto es que el vocablo es autóctono y pertenece al
dialecto indígena, como lo son también los nombres de Zulasquilla, Capíra y
Sisavita. Sin embargo, tratar de describir su significado o determinar el
sentido que representaba para nuestros aborígenes es bastante complicado. No obstante, la tradición ha enseñado una
interpretación que vale la pena recordar:
Una primera versión esboza que “el nombre Cucutilla está compuesto de los vocablos “cúcu” y “tilla”; con el primero, voz onomatopéyica con que se imita el canto
del Cuclillo, y el segundo la cubierta de los barcos pequeños"; hay
quienes agregan que además con el vocablo “tila” se conoce la flor del Tilo, un
árbol grande. Es razonable pues, pensar
que el Cuclillo (Ave trepadora con plumaje de color de ceniza, azulado por
encima, cola negra con pintas blancas y alas pardas) solía trepar por la “tilla” (corteza del mismo árbol) y
alegrar con su trinar “cúcu” el
ambiente de la región.
No obstante, la versión más verosímil plantea que la palabra
Cucutilla corresponde a un diminutivo de Cúcuta, nombre con el cual se conoció
el cacique indio que gobernó los valles de Cúcuta y que dio nombre al pueblo y
la doctrina de naturales de ese valle en tiempos coloniales; y dado que estas comunidades
del valle en cuestión eran igualmente Chitareros como los nativos de este
sector de Arboledas y la actual Cucutilla, permite deducir que en verdad el
nombre Cucutilla se trata de una adecuación toponímica en forma diminutiva de
Cúcuta. De hecho, la denominación de Cucutilla que se hizo de una hacienda o
estancia, corresponde a un topónimo ciertamente más tardío que el tradicional
Cúcuta, lo cual sugiere a todas luces que se trata de una migración y
redefinición del término, pues Cúcuta se conoce desde el Siglo XVI mientras que
Cucutilla viene a la luz ya entrado el XVII.
De cualquier manera más que tratar saber qué significado
tienen las raíces y morfemas del vocablo, lo que realmente interesa es
establecer ¿por qué razón y en qué momento los mestizos y blancos deciden
llamar así su población o asentamiento parroquial a la hora de constituirse
como tal?, y a partir de qué momento y
bajo qué perspectiva jurídica se generaliza la denominación de Cucutilla para
identificar este territorio?. Respuesta
que se dilucidará en la medida que se adentre en el estudio de la obra, donde
se encontrarán los suficientes elementos de juicio con los que aspiro
satisfacer nuestras propias inquietudes al respecto. Lo cierto es que este
nombre aglutina el sentimiento propio de los nacidos en esta tierra, podríamos
decir que en él se representan los sueños y pujanza de nuestros primeros
hombres, conservando tradición indígena y
sueño mestizo.
Por ahora, y para no adelantarnos a los acontecimientos, es
importante dejar en claro, que el territorio del actual municipio de Cucutilla
se conoció en la época de la conquista y la colonia con el nombre de “Valle de
las Arboledas”, que comprendió los territorios actuales de Arboledas y
Cucutilla, y es con este nombre que los conquistadores e historiadores dejaron
consignados las diferentes acciones que se desarrollaron en esta parte del
departamento. Lo que equivale a decir,
que en estos períodos no se mencionó la palabra Cucutilla para ningún hecho de
importancia en el lenguaje de los españoles. Razón por la cual en los dos
primeros capítulos no se utiliza este vocablo en procura de no caer en
anacronismos para referirse a este territorio. Pero ya sabemos que cuando se
diga “Valle de las Arboledas”, además de Arboledas estamos hablando asimismo
del actual Cucutilla.
Iniciemos pues, por recordar aspectos generales y propios
del municipio, con el fin de ubicarnos en el espacio geográfico donde se
desarrolló la historia que vamos a recorrer.
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