sábado, 23 de marzo de 2019

Camilo Torres y su papel en la parroquia de Cucutilla.


Para cumplir otro de los requisitos en el proceso de erección parroquial los vecinos procedieron a extender los poderes  necesarios para los abogados o procuradores de la Real Audiencia, a fin de que adelantaran en Santafe los trámites respectivos para obtener la categoría de parroquia, y solicitar el nombramiento de su primer cura párroco propio, ya que hasta la fecha los continuaba asistiendo esporádicamente el padre Joséf Gregorio Barragán cura del pueblo del Chopo.

En este sentido el día dos de diciembre del año 1801 se extendió el poder necesario: 

“En la vice-parroquia de Cucutilla, jurisdicción de la ciudad de Pamplona en dos días del mes de diciembre de este año de mil ochocientos y uno, ante mí, Don José Hipólito Arias, Alcalde partidario de ella por su Majestad  y testigos que se numeraran, parecieron presentes los vecinos de dicha vice-parroquia; que abajo harán firmas, a los cuales certifico que conozco y otorgaron, que dan y mantienen todo su poder cumplido; bastante quanto por derecho se requiera, y sea necesario especial para valer a uno de los Procuradores de la Real Audiencia, bajo las firmas vinculadas y requisitos necesarios, con todas las indemnizaciones que corresponden, siendo pues para todo ello, su anexo concerniente, incidente y dependiente le dan y confieren el poder y el más necesario con libre, amplia, franca y general administración tal que por falta de cláusula, requisito o individual mención que aquí no vaya declarado, no por eso deje de valer, porque las que se dijeren faltar las dan por mentadas, expresas y declaradas como si aquí lo fueren explícitamente; y con facultad de que pueda enjuiciar, jurar y sustituir en una o más personas de su satisfacción que a todas aprueban y relevan del cargo y contar en debida forma; y a lo que en virtud de este poder se obrare, obligan sus personas y bienes presentes y futuros. Con sumisión y poderío a las justicias de su majestad para que a ello les competa y apremien por todo rigor de derecho y vía ejecutiva como si lo fuera por sentencia definida por juez competente basada en autoridad de cosa juzgada y consentida sobre que renuncian su propio fuero, domicilio y vecindad; y la ley sit combennesti de jurisdiccione obnium judium y ultima pragmática de sumisiones como de las demás leyes, fueros y derechos de su favor, hasta la general en forma del derecho que lo prohibe.  En cuyo testimonio así lo dijeron, otorgaron y firmaron conmigo las que supieron, y por los que no lo hicieron a su ruego testigos que se hallaron presentes con quien actuó por no haber escribano. José Hipólito Arias; A ruego de Manuel Buitrago y de Custodio Ortega y por mi: Lorenzo Antonio González; A ruego de Ramón Sánchez, y Donato Anguita y por mi: Bartolomé Ortega; A ruego de Francisco Mexía y de Ignacio Rincón y por mi: José Antonio Sánchez; Juan Mendoza; Por mi padre Cayetano González: Francisco de Paula Gonzáles; A ruego de José Cruz Bustos, y de Daniel Ortega, y de José Antonio Rozo, y de Juan Antonio Cárdenas, y de francisco y de Pablo Antonio Ortegas, y por mi: Feliz Cantalicio Díaz;  Juan Ignacio Montes; A ruego de José Antonio Ortega y de Juan Esteban Ortega, José Diego Díaz; José Carlos Gonzáles; a ruego de Dámaso Mendoza y por mi: Juan Agustín Contreras; Gregorio Sánchez; Mateo Parada; A ruego de Francisco Buitrago y testigos Juan Francisco Gonzáles; A ruego  de todos los demás vecinos que no saben firmar y por testigos: Rafael Sánchez, testigo José Gregorio Megia”

Con esto la Real Audiencia asigna a los abogados Camilo Torres y Luis Ovalle, quienes en mayo 13 de 1802 firman su primer documento en representación como apoderados de los vecinos de Cucutilla dentro del expediente de erección parroquial:

Ilustrísimo Señor,
Santafe, mayo 13 de 1802

Luis de Ovalle, Procurador del numero; en nombre de los vecinos de la Vice-parroquia de Cucutilla y en virtud de su poder que debidamente presento  acepto y juro inserto en el testimonio que en la misma forma exhibo ante Vuestra merced,  en la que más haya lugar por año parezco y digo: que desde la extinción del pueblo nombrado de Arboledas, han tratado los vecinos establecidos en Cucutilla de la creación de parroquia, y aún han comenzado por tres veces a levantar su iglesia; pero sea que el enemigo común que trabaja siempre en oponerse a estas Santas Obras haya frustrado sus esfuerzos; sea que Dios haya querido probar más su fervor; sus intentos no han logrado el deseado fin.  Ahora que el celo pastoral de Vuestra Señoría los ha reanimado con sus exhortaciones y sus cartas, prometiéndoles de su parte sus auxilios, y aún concurriendo efectivamente con ellos, pues han recibido socorros espirituales y temporales prometiéndoles otros más; se han dedicado con un nuevo empeño y esperan que Vuestra Señoría consume esta obra tan digna de su piedad.           
Los vecinos de Cucutilla han comenzado su iglesia y trabajan constantemente, han cedido gustosos el sitio así para ella como para la plaza, cárcel y casa del Cura, tienen ornamentos y vasos sagrados, en una palabra nada parece que podría dificultar su empresa, sin embargo ya vemos que hallan obstáculos de parte de algunos de sus mismos convecinos y hermanos que es preciso superar.
          Los que están establecidos en el resguardo del establecido pueblo de Arboledas, no solo no conspiran a éste santo fin, sino que tratan de impedirlo guiados talvez de su particular interés y retraídos de la pequeña
incomodidad de caminar un poco para concurrir a la iglesia común.
          La Vice-parroquia de Cucutilla está establecida entre Pamplona y Salazar de las Palmas, dista de la primera cerca de dos días y casi otro tanto de la segunda, entre estas dos ciudades y entre enorme distancia no hay curato alguno y el pueblo de Arboledas venía a quedar en la extremidad del territorio donde hoy está establecido el vecindario.  Los términos por donde los feligreses de Cucutilla solicitan la demarcación de la parroquia son los mismos que tenía aquel curato, los vecinos son numerosos y los de Arboledas son pocos, se puede decir que son unos arrendatarios de los resguardos y aquellos unos propietarios.  Además de esto el terreno de Cucutilla es fértil y abunda en aguas  cristalinas y sanas; tiene montes para construcción y para leña, el temperamento es suave y el sitio seco y plano para habitaciones.
          Si a estas ventajas se reúne la necesidad de éstas pobres gentes, no queda arbitrio para negarse a su solicitud; y la prueba de ello son los informes que ha hecho a Vuestra su Señoría el cura del Chopo a donde está agregada la Vice-parroquia; exponiendo las espixionales que padecen por la distancia de la iglesia parroquial y la falta de un inmediato pastor.
          En éstas circunstancias, nada resta sino que conforme a lo prevenido por los sagrados Cánones y  Reales disposiciones se lleve a efecto la fundación de parroquia sin atender a una contradicción que tanto perjuicio traería en lo espiritual a éstos buenos vecinos y que talvez los haría desmayar viendo que por cuarta vez se frustraran sus designios.
          Para lograr y cumplir con lo que es de su obligación, han otorgado la escritura que da principio a las diligencias presentadas en que se sujetan a contribuir con 250 pesos al Cura y además lo necesario para la manutención de las tres Cofradías forzosas y lámpara.                        
          Pero como acaso pueda convenir para remover toda duda, que se purifiquen los particulares insinuando suplicio a Vuestra merced que librándose un despacho cometido, bien al mismo Cura del Chopo Don Gregorio Barragán u a otro eclesiástico que a bien se tenga (como no sea Don Anselmo García que es el que sostiene a los Arboledas en su pretensión y que apoya la contradicción) reconozca por si mismo la nueva iglesia que se esta fabricando y el estado de ella, los ornamentos y vasos sagrados que tenga la Vice-parroquia de Cucutilla y la nueva planta de la población, extensión, límites del territorio que asociándose en caso necesario y por los fines temporales que en semejantes poblaciones recomiendan las leyes con el Alcalde de aquel partido o dejando así esta parte como la de la formación de un padrón de vecinos y del mapa y plan del terreno al cuidado de estos para que lo soliciten ante la justa real, remitiéndose todo a Vuestra Señoría a fin de que instruido con los conocimientos necesarios del expediente se provea lo que corresponda en justicia.  Por la mediante pido así lo determine justo en lo necesario, firman: Camilo Torres y Luis de Ovalle”

Dentro del proceso se autoriza al padre Joséf Gregorio Barragán para que levante el Inventario de reliquias y alhajas en la vice-parroquia de Cucutilla, tarea que se realizó el 16 de junio de 1802, en compañía del alcalde partidario y varios vecinos como testigos:

v  “... Tres rosarios; uno de oro fino, otro de piedras de cristal y por último uno de binturin blanco con pasadores de oro y cruz de plata.
v  Veinte cuadros de barios Santos
v  Del un lado del Altar, un San Antonio de bulto de vara de alto. Y del otro lado, San Francisco de Padua  también de bulto.
v  Una imagen de la Concepción, también de bulto, de vara de alto.
v  Un patriarca San José de bulto, de media vara de alto.
v  Un Christo Crucificado de bulto, de tres cuartas de alto.
v  Un San Juan Bautista de bulto.
v  Una mesa de madera, o Altar portátil, sobre el que, se celebra el santo sacrificio de la Misa.
v  Un confesionario de madera con sus rejas de lata.
v  Un cáliz de plata, cucharita y patena sobre dorada en oro
v  Dos pares de vinajeras, las unas de plata fina torniadas con sus salvillas en lo mismo; las otras en cristal con su salvilla en peltre
v  Tres campanitas de cobre
v  Un misal y un ritual romano nuevo
v  Dos campanas; una grande y una mediana las que sirven de tocar a misa...”

Además de lo anterior aparece inventariado ornamentos, flores, telas, estandartes, candelabros, andas y estampas, lo que permite deducir que no obstante, de ser una humilde capilla los vecinos se preocuparon siempre por mantener lo necesario para sus preceptos religiosos.

Los feligreses de Arboledas a pesar que Cucutilla en la fecha se propuso como curato para todo el valle continuaban por su parte adelantando el proceso de erección a parroquia alegando tener curato desde tiempo atrás, actividad auspiciada por el Doctor don Anselmo García, cura interino de los dos feligresados quien se oponía a la erección parroquial en el sitio de Cucutilla lo que hizo que la construcción tuviera serios retrasos, pues el Doctor Anselmo García siempre quiso desanimar a los cucutillenses e impedir que la gente de Arboledas continuara voluntariamente trabajando y participando en la construcción del templo: “...los vecinos que susisten de este lado del río Arboledas estaban muy prontos y empeñados a trabajar por cuadrillas en la obra de nuestra iglesia, pero desde el 1 de marzo que llegó el doctor Don Anselmo García, a servir este lugar, le suspendió los ánimos y no les dejó venir a trabajar más, prometiéndoles sacar su lugar por separado y que no les diese cuidado que ya tenía por debajo a los de Cucutilla, que dicho García fue quién quitó las diligencias, que se mandaron a vuestra señoría en el correo del día 8 de diciembre...” El informe anterior reafirma la competencia entre los vecinos de Arboledas y Cucutilla.

A pesar de las dificultades los cucutillenses continúan en su empeño y en junio 18 de 1802 el presbítero Joséf Gregorio Barragán y Don Gregorio Sánchez, alcalde partidario en la vice-parroquia de Cucutilla informan sobre el estado de construcción de la obra: "Se halla ya construida, lo que es el Arco Toral de cada y cuarta de acto, de cal y piedra; el cañón de la Yglesia, sacristía, bautisterio y campanario, está todo simientado de piedra, y pronto para seguir el calicanto de boca de tierra para arriba..."

Pero el sueño de estos vecinos de erigirse en parroquia continuaba bajo la sombra de algunos vecinos de Arboledas y últimamente de su apoderado Francisco Fernández que en diferentes oportunidades como en oficio dirigido al Virrey Pedro de Mendieta en febrero 22 de 1803 busca impedir que el vecindario de Cucutilla se erija en parroquia diciendo que los vecinos sin ser autorizados adelantan la construcción de la iglesia, y alega además, que estos siempre han estado agregados a la Iglesia de Arboledas; y que los vecinos de Arboledas que trabajan en la construcción de esa iglesia estaban obligados por el alcalde partidario que está a favor de los vecinos de Cucutilla y que por no tener licencia para construir el templo pide que se le paguen los días trabajados a los vecinos de Arboledas y que se le ordene al Alcalde partidario residir en Arboledas, y que los vecinos no están dispuestos a sujetarse a la fundación de Cucutilla.


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