De acuerdo a la tradición, por la década de los 1890–1900 se
planta el Samán en el centro de la plaza. Dado que este árbol forma parte de
las semillas que cultivara el General Severo Olarte jefe divisionario de la
antigua guardia colombiana quien en 1888 hizo traer semillas del Samán de
Táriba (Estado Táchira–Venezuela) para sembrarlas en la finca San Lorenzo cerca
a Bochalema y del mejor arbolito saliente seleccionó uno para plantar en el
centro de la plaza de ese municipio. De estos arbolitos cultivados, algunos fueron
trasladados para otros municipios como seguramente sucedió con la población de
Arboledas según se puede deducir del relato de Francisco Contreras consignado
en la Monografía de Arboledas: “Yo presencie el derribo de un “UBO”, árbol
que estuvo en el centro de la plaza hasta el año 1887... Luego fue suplantado
por el histórico “SAMAN“(árbol que hoy no existe en esa población).
Este relato apoya la tradición: El Samán de Cucutilla es hermano del de
Bochalema” que asegura que un arbolito de los allí cultivado es llevado por
vía La Montaña al municipio de Cucutilla y plantado en el centro de la plaza.
El cuidado, cariño y empeño colocado por los cucutillenses de la época
hizo que el árbol creciera y se convirtiera en motivo de admiración por su
belleza y grandeza, convirtiéndose en testigo fiel de las vivencias del
municipio; bajo su sombra se han enamorado muchas parejas, bajo su sombra los
antiguos vendedores colocaban sus ventas; en sus ramas se han extendido por
muchos años las luces que adornan el parque en las noches decembrinas.
A pesar que este árbol representa mucha historia y valor sentimental
para el municipio, da nostalgia ver que los años vayan dejando sus huellas en
él y poco o nada se haga para mantenerlo esbelto y frondoso; pues todos somos conscientes
que sus gajos ya no reverdecen como antes, y dentro de poco si no se le presta
atención seguramente tendremos que decir a nuestros hijos señalando el centro
de la plaza “... y aquí había un hermoso
Samán”.
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